22.6.06

CHE, LOS ENEMIGOS SON LOS OTROS


"LOS HERMANOS SEAN UNIDOS..."

Ayer, en una localidad checa a 150 kms. de Francfort, donde están alojados porque es más barato, los barrabravas argentinos mostraron la hilacha. La denominada segunda línea de La 12, integrada por elementos de Defensa y Justicia de Florencia Varela, y los de Independiente, del club al que pertenece al vicepresidente y tesorero de la FIFA, Humberto Julio Grondona, se encontraron y se dieron como para que tuvieran, hubo un herido de arma blanca destrozaron las instalaciones del hotel, fueron encarcelados y habría intervenido el embajador argentino, todo esto bajo el supuesto marco de la ruptura del pacto de no agresión acordado entre los diferentes grupos antes de partir hacia tierras tan extrañas..

A todo esto, desde que empezó este Mundial, los bravos dueños de casa no se han andado con chiquitas y se aporrearon con su policía que es un gusto, los famosos hooligans que no son hooligans, ensopados en cerveza y gin, también boxearon un poco a los uniformados teutones y si se quiere hablar de combates en serio, con 300 detenidos, antes, durante y después del Alemania-Polonia, donde recordaron algunos episodios y cuentitas pendientes de la Segunda Guerra.

Es decir que más allá de juicios de valor baratos, moralina de circunstancia y otras pavadas, las barras europeas mostraron lo obvio: se agarran a palos con los contrarios o con la policía. Nuestros representantes telúricos, como alguna vez lo hicieron en una Copa América en Paysandú, ROU, se dan entre ellos, por cuestiones domésticas, por la famosa guerre de boutique, como la llamaba el viejo y entrañable Lisandro de la Torre.

A todo esto, en la mencionada ciudad alemana, luego del encuentro con los holandeses, la policía local procedió a llevarse un rato al núcleo de Los Borrachos del Tablón riverplatenses, el grupo más fuerte, y circularon especies varias, como que no querían que entraran más a la cancha y demás. Por suerte, para eso están los dirigentes argentinos: se encargaron de hacer de voceros y decir que eran bolazos del periodismo.

Todo al revés, para variar.

Y todo para olvidarnos que entre la multitudinaria presencia argentina se encuentran 15 agentes especiales de la Policía Federal con todo pago y al frente el titular de la 51a., casualmente la que tiene en su territorio al Monumental de Núñez. La policía alemana puede dormir tranquila. Entre otras cosas porque para armar quilombos de órdago los nuestros se van a la República Checa y nuestros Sérpicos pueden disfrutar tranquilos del Mundial. En territorio alemán se portan mejor que Heidi y en el negocio de la reventa de las entradas gratis que supieron conseguir, minimo 150 euros cada uno, les va cada vez mejor.

Los bien informados enviados argentinos dejaron saber que de Independiente quedaron guardados Bebote, Peruano, Correntino, Tortuga y Rana. De los de Florencio Varela, en cambio, sólo Vaca, Tatú y Colorado. Todo esto ha sembrado de espanto a familiares, esposas, novias, amantes y amigos que no pudieron ir, ya que son los únicos que se han podido enterar realmente de quién corno son. Porque, al parecer, no tienen nombres de pila, apellidos, ni pasaportes numerados.

A los estructurados policías germanos, al tenor de lo despachado desde el lugar de los hechos, los tiene bastante esgunfiados que lleven semejante cantidad bombos y redoblantes, como también que en las tribunas no guarden los lugares preestablecidos en el talón de la entrada. Son de otro planeta, evidentemente. Vaya a saberse qué satisfacción de mierda encuentran vivir una vida tan ordenada con cada cosa en su lugar y un lugar para cada cosa.