12.9.05

CAVE NE CADAS, DIOS

A poco de andar, luego de un comienzo donde nunca la tevé mundial había visto nada igual, con un raiting que lo hicieron trepar a 40 puntos y resulta que no llegó a 26, en su cuarta emisión, ya saturado el formato de adorar siempre lo mismo y chupetearse entre los famosos de siempre, La Noche del Diez, conducido por Diego Armando Maradona con la asistencia de Sergio Goycochea, ha empezado a declinar peligrosamente, ya está 8 puntos abajo y en la última hora, estirado por un chicle por la producción de Pol-ka que dirige Adrián El Chueco Suar para tratar de mantener en cierto nivel a Canal 13, baja hasta los 12.

Las elucubraciones filosóficas ya han comenzado. El trillar lugares comunes de no hay como la familia, con la Tota y don Diego por el otro, Claudia Villafañe no se sabe jugando a qué mucho más allá, sin contar a todos los ausentes, el regalo de autos 0 km, algún guiño izquierdoso simpático de tirarle a George W por la guerra de Irak y mencionar y sacar alguna imagen de Fidel Castro ya no joden a nadie.

«Es bien conocido el indio que nunca tuvo herencia», decía un antepasado pampeano de Ambrosio, y Maradona nunca va a poder más que un excepcional jugador de fútbol, lo cual no es poco pero tampoco es mucho. Ahora, como modelo cultural social, siempre fue nefasto y lo seguirá siendo a la par de la magia de su zurda increíble.